Cuando lo que la rodea es un mundo incomprensible que no la comprende.

 

Cuando el único refugio de su existencia reside en un frágil abrigo expuesto a las inclemencias del amor, nuestra protagonista se sumerge en una tormenta inquietante, brumosa al principio, tempestuosa después, desconcertante siempre, que quiebra en ahogados sollozos las tensadas cuerdas de un alma anhelante de cariño y comprensión.

 

Cuando el doloroso aullido se trastoca en contenido gemido de desamparo y desolación.

 

Cuando la galerna azota los atribulados navíos en pos de un sereno puerto, sólo el absurdo es instrumento para expresar el sinsentido del deseo de un corazón palpitante.

 

¿Es una tragicomedia o un drama trágico revestido de humor?.

 

Amarga comedia que entre risas y desasosiegos nos presenta una realidad que anida en lo más intrincado de los bosques de nuestra conciencia.

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